sábado, 20 de noviembre de 2010

Respuesta. José Hierro

RESPUESTA

Quisiera que tú me entendieras a mí sin palabras.
Sin palabras hablarte, lo mismo que se habla mi gente.
Que tú me entendieras a mí sin palabras
como entiendo yo al mar o a la brisa enredada en un álamo verde.

Me preguntas, amigo, y no sé qué respuesta he de darte,
Hace ya mucho tiempo aprendí hondas razones que tú no comprendes.
Revelarlas quisiera, poniendo en mis ojos el sol invisible,
la pasión con que dora la tierra sus frutos calientes.

Me preguntas, amigo, y no sé qué respuesta he de darte.
Siento arder una loca alegría en la luz que me envuelve.
Yo quisiera que tú la sintieras también inundándote el alma,
yo quisiera que a ti, en lo más hondo, también te quemase y te hiriese.
Criatura también de alegría quisiera que fueras,
criatura que llega por fin a vencer la tristeza y la muerte.

Si ahora yo te dijera que había que andar por ciudades perdidas
y llorar en sus calles oscuras sintiéndose débil,
y cantar bajo un árbol de estío tus sueños oscuros,
y sentirte hecho de aire y de nube y de hierba muy verde...

Si ahora yo te dijera
que es tu vida esa roca en que rompe la ola,
la flor misma que vibra y se llena de azul bajo el claro nordeste,
aquel hombre que va por el campo nocturno llevando una antorcha,
aquel niño que azota la mar con su mano inocente...

Si yo te dijera estas cosas, amigo,
¿qué fuego pondría en mi boca, qué hierro candente,
qué olores, colores, sabores, contactos, sonidos?
Y ¿cómo saber si me entiendes?
¿Cómo entrar en tu alma rompiendo sus hielos?
¿Cómo hacerte sentir para siempre vencida la muerte?
¿Cómo ahondar en tu invierno, llevar a tu noche la luna,
poner en tu oscura tristeza la lumbre celeste?

Sin palabras, amigo; tenía que ser sin palabras como tú me entendieses.

José Hierro. Alegría 1947

Dedicado a todos aquellos que no necesitan palabras para comprender la titánica fuerza que mora en el ser humano...

domingo, 7 de noviembre de 2010

Homenaje a Catalina Valls

"Querida amiga que has partido hacia el poniente.
Llevas contigo la primavera.
Tu alma grande, generosa y reluciente,
aquí y allá, por toda la eternidad será verdadera.
¿Escuchas? Cantan los ángeles, ya llegas a casa.
los que nos quedamos en esta tierra,
te decimos con todo el corazón...por tu ejemplo, Gracias."


5-11-2010. In memoriam.

Querida Catalina, por fin te has librado de las ataduras, y como un barco has partido a navegar con las estrellas. Ójala allí, en el cielo, te dejen montar una escuela de vida. Tú eres una gran maestra. Reservame un sitio para cuando yo vaya a acompañarte. Recitaré para ti los poemas que tanto te gustaban...
Las almas que aprendan de ti, cuando vengan a la existencia serán siempre alegres, a pesar de los embates de la vida. Verán amaneceres, estrellas y flores en el corazón de los hombres... y un entusiasmo brotará en sus acciones. Sabrán poner el corazón en cada instante y se entregarán como tú al teatro de la vida con el mejor de los papeles, ser auténtico, ser bueno y saber compartir con la gente la alegría.
Te llevaré en mi corazón y estarás viva eternamente en mi recuerdo.
Con todo mi amor. Víctor.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Dichoso aquel. Poesía

DICHOSO AQUEL

Dichoso aquel que en silencio ama,
el que desgrana el misterioso veredicto
de la vida, resuelto a entregarse
entero, sin medida, por aquellos
que aun sin conocer, en su corazón guarda.

Dichoso, el que siente correr
por sus venas la divina melodía.
El que encontró en el profundo piélago
la añorada Itaca, el que no teme
a las sombras en la arena, y ante
una lágrima o una sonrisa se arrebata.

Dichoso el que en el espacio
de un segundo, es capaz de saborear
despacio todo un mundo de aromas
y colores, de risas y de llantos,
el que con ojos de niño
ve amaneceres en los ocasos
y extrae el jugo del mercurio
convirtiéndolo como alquimista en bálsamo.

Dichoso porque tiene el poder
de abrir los ojos y no cerrarlos.
de construir castillos
con sus propias manos
y puentes, y templos
y hasta luminosos faros.

Dichoso tú que sabes de qué hablo.

Víctor Vilar

Mi tesis de preescolar



Una gran lección que nos enseña el arte de la analogía. !Magnífico!